Szentendre

La ciudad pequeña que está cerca, al norte de Budapest más bien se podría comparar con un joyero. En su pequeño territorio hay una inmensa catidad de espectáculos, se podría parar delante de casí todas las casas del centro para admirarla. La atmosfera meditteránea, que es uníca acerca de las ciudades de Hungría, es debida a los pueblos que inmigraron desde la área meditteránea hace cientos años. Caminando por los callejones , calles adoquinadas, e iglesias antiguas tendremos la sensación de como si estuvieramos en alguna ciudad pequeña del Mar Adriático.

La ciudad nombrada por San Andrés se la conocía en le época romana como Ulcisia Castra (Castillo de lobos), como una parada importante de la línea de defensa del Imperio Romano. La fortaleza de la ciudad tenía un tamaño significante, era capaz de recibir a más de 1000 soldados. Pasaron por aquí varios emperadores, entre otros Septimus Severus, Caracalla y Valentinianus también. El castillo lo rodeaba un llamado vicus militaris o población burguesa donde aparte de los familiares de los soldados vivían artesanos y comerciantes que proveían a los soldados con sus mercancías.

En el territorio de la población los romanos establecieron las condiciones de la civilización, las vías,acueductos y edificios de piedra que definen hasta hoy día la estructura de la ciudad. Las calles Római sánc, Pannónia y Őrtorony y otras siguen guardando el recuerdo de los romanos.

En el siglo V no puede resistir la línea de defensa romana, y entregan la fortaleza. Durante los tiempos de los longobardos la importancia de la población era muy grande y luego en los tiempos de los avaros servía como el centro de los tribus.

Los húngaros aparecieron en la área en el siglo IX cuando se posesionaron de este lugar estratégicamente importante bajo la gestión del caudillo Kursan. La población medieval se construyó sobre la colina Templom (Iglesia) que era una iglesia sacrificada para el honor de San Andrés y él fue a la vez el epónimo de la ciudad. Creció la importancia de la ciudad desde el siglo XIV porque estaba en el camino que conectaba los dos centros reales Buda y Visegrád.

Desde el siglo XIV huyeron numerosos eslavos del sur a Hungría por la invasión turca que recibieron refugio y privilegios de los reyes húngaros. Llegaron unas 6000 personas a la ciudad de Szentendre también que construyeron sus propios barrios con sus iglesias, así hasta hoy día están visibles las partes serbias, dalmatas o griegas de la población.

Los eslavos que llegaron a principios esperaban haber dejado sus tierras sólo transicionalmente, por eso construyeron iglesias de madera, pero después de enterarse de que los sucesos no permitieron que volvieran levantaron ya iglesias de piedra también a principios del siglo XVIII.

Museos, exposiciones

Szentendre no tómo por casualidad la denominación de la ciudad de las artes, hoy también residen y crean cientos de artistas. Numerosos museos y exposiciones esperan a los visitantes de los que merece la pena las de Margit Kovács, una de las artistas contemporáneas de cerámica, o la exposición e Jenő Barcsay artista gráfico y pintor. Es también muy popular entre los clientes el Museo de Mazapán y La Cafetería de Lajos Dobos que tienen muchas curiosidades para sus visitantes.

La Cruz Barroca

Se la levantó en la Plaza Mayor de la ciudad en 1763 como recuerdo de la Compañía Comercial pravoslavo después de que la epidemia de peste evitó la ciudad. Según la tradición bajo la cruz decorado con iconos se encuentra un hombre muerto por la peste y enterrado cara abajo.

Iglesias

Los pueblos balcánicos que huyeron aquí construyeron varias iglesias, hay ocho y desde siete está hasta hoy y cuarto de ellos indica en el nombre el origen de los constructores también.