Hajdúszoboszló

Oyendo su nombre se ocurre su baño termal a todos que sean húngaros o extranjeros. Mucha gente llevó su buena fama a todas partes del mundo manifestando su gratitud y muchos sienten la pretensión de volver otra vez sanos también sólo por la atmosfera „soboslina”.

Aunque aquí realmente ahy menos monumentos, Szoboszló es una de las poblaciones húngaras que fueron mencionadas más antes. Ya en 1075 en la carta de donación de Géza I.figura el nombre de Szoboszlóvásár. En el siglo XV.era la propiedad de los Hunyadi. En aquella época se construyó su iglesia fortificada cuya muralla está hoy en día y se puede visitarla.

La invasión de los tártaros aquí también causó una despoblación, pero gracias a István Bocskai, al caudillo de Transilvania se renació. Él fue el que repartió parcelas y hogar para los setecientos jeduques equestres que resistieron muy bien en las luchas de independencia contra los Habsburgos. En esa temporada recibió el prefijo „jeduque” (en húngaro hajdú). La ciudad orgullosa por sus antecesores heroicos levantó una estatua para el caudillo.

A finales de los años 1800 el número de los habitantes de la población alcanzó el quince mil.

El año de 1925 cambió la vida de Hajdúszoboszló, cuando aparte del gas natural que se estaba buscando afloró también agua de olor especial. En este tiempo su efecto curativo no era conocido todavía, esto se descubrió cuando empezaron a mitigarse las quejas articulares de las mujeres que estaban lavando las ropas en el agua acumulado en las cárcavas.

A partir de esta hora comenzó el desarollo deliberado de la ciudad que luego llegó a ser la „Meca de los reumáticos”. Los últimos años le ha pasado un desarollo significante al baño que está extendiéndose en un territorio muy grande. Se emplea las técnicas más modernas bajo un control médico profesional, con un fondo técnico que es realmente de alta calidad, pero entre sus visitantes no sólo se encuentra enfermos reumáticos.

Se construyó aquí la playa más grande del país con megatoboganes, barco de pirata, faro, „playa „ con arena , agua ondeante y palmas, todo eso ofrece ya un recreo distinto para los niños, familias y jovenes.

Cuando llega la noche tampoco se aburren los clientes. En estas horas los restaurantes , cafés y locales cercanos son los quje tendrán más importancia. La ciudad ofrece una serie de posibilidades de entretenimiento que se extiende también hasta la temporada otoñal-invernal para invitar a los clientes para que pasen más tiempo allá.

Casa de campanas

Tal vez todos visiten estas campanas preparadas de una mezcla especial de aluminio sin que nosotros lo recomendemos, ya que ellas atraen la atención de todos por su exterior adornado y por encontrarse no muy lejos de la entrada del baño. Su creadora y donadora es una artista que procede de Hajdúszoboszló.

El museo de Bocskai

No se nos olvida que aparte del baño la agricultura y la ganadería eran las que originalmente daban la existencia para los habitantes de la región, que influía en la mentalidad, tradiciones y en la arte de ellos. Si queremos echar una mirada a la vida antigua tradicional es recomendable visitar el Museo Bocskai donde podemos ver bordaduras, tabardos de pastor,vestidos preparados de cuero de oveja, tallas y herramientas de hierro forjado adornadas.

La muralla de alcazár

Si tenemos curiosidad por el monumento más antiguo de la ciudad merece la pena que demos un paseo hacia la iglesia reformada de la Plaza Kálvin cuya muralla espectacular fue construida alrededor los años 1400.